Rescatando la sana doctrina de los mismos cristianos
Me parece increíble leer y escuchar varios comentarios errados o ideas fuera de fundamento de diferentes hermanos en la fe, no sé si es por que hay falta de lectura bíblica o hay todavía pensamientos e ideas que tenemos que rendir al Señor, hay veces que las ideas del mundo que son contrarias a la palabra de Dios llenan nuestra mente, por eso debemos de rendir todos nuestros pensamientos, todas nuestras motivaciones, todas nuestras ideas e intenciones a la luz de la palabra de Dios.
La sana doctrina es atacada desde tiempos antiguos y un cristiano verdadero tiene estar alerta para defender lo puro y limpio de la palabra de Dios de un sin fin de ataques que vienen del reino de las tinieblas, recordemos que Satanás odia la sana doctrina, por eso intenta desesperadamente contaminarla con doctrinas satanicas y humanas para causar que las almas se pierdan y sean cegados por la mentira.
La sana doctrina es la enseñanza bíblica y adecuada de verdades teológicas que llevan a la salud espiritual y a vidas transformadas tanto de los individuos como de la iglesia.
Un cristiano verdadero ama la sana doctrina porque Dios la ama dice en Tito 1:9 que un buen siervo de Jesucristo tiene que retener la palabra fiel para que pueda exhortar con buena enseñanza y convencer a los que la contradicen, por eso debemos leer la palabra con una actitud humilde, saciar nuestra alma de sus enseñanzas porque así conoceremos más a Dios, podremos saber lo que le agrada y lo que le desagrada, y si alguien la ataca entonces podemos presentar defensa fiel con la ayuda del Espíritu Santo.
La sana doctrina nos hace cristianos maduros, es tiempo de dejar de ser bebes espirituales, o personas llevadas por cualquier viento de doctrina, la sana doctrina hace crecer nuestra fe, llena nuestra alma, nos alienta a servir a Dios con entrega y pasión, en santidad y consagración, quien no ama la sana doctrina siempre vivira insatisfecho y siempre querra oir lo que le conviene oir, la sana doctrina endereza nuestro camino, nos guia a la verdad.
Debemos amar la sana doctrina porque esta fluye del evangelio, dice en 1 de Timoteo 1:11 "según el glorioso evangelio del Dios bendito, que a mí me ha sido encomendado." la sana doctrina comunica el evangelio con verdad que trae salvación a las personas, la sana doctrina viene de nuestro Señor Jesús, quien vino al mundo a salvarnos de la perdición, como cristianos debemos de amar compartir este evangelio, que todo el mundo escuche el mensaje verdadero, puro, limpio, sano de la salvación.
la sana doctrina nos guía a la santidad, a la entrega completa a nuestro Señor, nos hace rechazar la falsa doctrina, la sana doctrina es como un escudo de verdad contra las mentiras y filosofias humanas y satanicas, la sana doctrina nos lleva a la acción de querer servir a Dios sin interés ni por conveniencia sino con humildad, integridad y pasión.
Un cristiano verdadero que ama a Cristo, ama la sana doctrina, porque busca agradarle a él, que solo él sea glorificado, que el sea honrado y alabado por siempre, amén
Queridos hermanos, amemos la sana doctrina, estudiemos la Biblia con fidelidad y cuidado, pues haciendo esto agradaremos a Dios y nunca seremos desviados del camino verdadero.
2 de Timoteo 1: 13
Retén la forma de las sanas palabras que de mí oíste, en la fe y amor que es en Cristo Jesús.
Arturo Aguilar
La sana doctrina es atacada desde tiempos antiguos y un cristiano verdadero tiene estar alerta para defender lo puro y limpio de la palabra de Dios de un sin fin de ataques que vienen del reino de las tinieblas, recordemos que Satanás odia la sana doctrina, por eso intenta desesperadamente contaminarla con doctrinas satanicas y humanas para causar que las almas se pierdan y sean cegados por la mentira.
La sana doctrina es la enseñanza bíblica y adecuada de verdades teológicas que llevan a la salud espiritual y a vidas transformadas tanto de los individuos como de la iglesia.
Un cristiano verdadero ama la sana doctrina porque Dios la ama dice en Tito 1:9 que un buen siervo de Jesucristo tiene que retener la palabra fiel para que pueda exhortar con buena enseñanza y convencer a los que la contradicen, por eso debemos leer la palabra con una actitud humilde, saciar nuestra alma de sus enseñanzas porque así conoceremos más a Dios, podremos saber lo que le agrada y lo que le desagrada, y si alguien la ataca entonces podemos presentar defensa fiel con la ayuda del Espíritu Santo.
La sana doctrina nos hace cristianos maduros, es tiempo de dejar de ser bebes espirituales, o personas llevadas por cualquier viento de doctrina, la sana doctrina hace crecer nuestra fe, llena nuestra alma, nos alienta a servir a Dios con entrega y pasión, en santidad y consagración, quien no ama la sana doctrina siempre vivira insatisfecho y siempre querra oir lo que le conviene oir, la sana doctrina endereza nuestro camino, nos guia a la verdad.
Debemos amar la sana doctrina porque esta fluye del evangelio, dice en 1 de Timoteo 1:11 "según el glorioso evangelio del Dios bendito, que a mí me ha sido encomendado." la sana doctrina comunica el evangelio con verdad que trae salvación a las personas, la sana doctrina viene de nuestro Señor Jesús, quien vino al mundo a salvarnos de la perdición, como cristianos debemos de amar compartir este evangelio, que todo el mundo escuche el mensaje verdadero, puro, limpio, sano de la salvación.
la sana doctrina nos guía a la santidad, a la entrega completa a nuestro Señor, nos hace rechazar la falsa doctrina, la sana doctrina es como un escudo de verdad contra las mentiras y filosofias humanas y satanicas, la sana doctrina nos lleva a la acción de querer servir a Dios sin interés ni por conveniencia sino con humildad, integridad y pasión.
Un cristiano verdadero que ama a Cristo, ama la sana doctrina, porque busca agradarle a él, que solo él sea glorificado, que el sea honrado y alabado por siempre, amén
Queridos hermanos, amemos la sana doctrina, estudiemos la Biblia con fidelidad y cuidado, pues haciendo esto agradaremos a Dios y nunca seremos desviados del camino verdadero.
2 de Timoteo 1: 13
Retén la forma de las sanas palabras que de mí oíste, en la fe y amor que es en Cristo Jesús.
Arturo Aguilar
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